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Mostrando entradas de octubre, 2014

El Camino se viste de Otoño

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S uele llegar sin avisar y a veces, como en la presente ocasión, disfrazado de veranillo de San Miguel, incluso en esos lugares donde parece que el gélido Bóreas se ha aposentado eternamente. De libre albedrío y de espíritu inquieto, deja una singular tarjeta de visita por todos aquellos lugares por donde pasa, jugando, ¡qué duda cabe!, con los colores gloriosos del ocaso. Si alguien le pregunta, diría que es el gran burlador, el pintor romántico por excelencia. O quizás, ocultando un rubor dorado en su sonrisa, dejaría que fuera otro quien viera en él al gran Maestro, aquél cuya prudencia deja hojas marchitas señalando el Camino hacia el Jardín de la Madre Oca. Hay quien dice, asegura y persevera -que para eso la vieja Hispania no sólo es tierra de pan y vino, sino también de dimes y diretes-, que se hace acompañar por una cohorte de dulces, gráciles y escurridizas mancebas a las que alguien, seguramente poseedor de un corazón de poeta, identificó -tal vez huyendo apresurado de la

Un pueblo y una parroquial: San Salvador

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C omo colofón a esta pequeña aventura por el siempre interesante entorno de los Montes Torozos, por la mente inquieta del peregrino circula el recuerdo de un pequeño pueblo, que lleva idéntico nombre que su iglesia parroquial: San Salvador. San Salvador, es un pueblecito castellano –de esos que duermen la siesta en la canícula al compás de las melancólicas cigarras-, situado entre Vega de Valdetronco –todo el que llega a su altura por la autovía de La Coruña, observa con curiosidad el armazón de una antigua iglesuca, situado prácticamente a pie de carretera-, y Torrelobatón, localidad de cierta importancia que, no obstante, parece relativamente pequeña en comparación con la fantástica mole de su bien conservado castillo medieval. D e románica medievalidad –recuerda gratamente el peregrino-, es la planta de la parroquial. Una parroquial, que a pesar de las reformas que se evidencian actualmente en su conjunto, puede presumir, desde luego, de mantener hasta cierto punto intact

Arroyo de la Encomienda: la iglesia de San Juan

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C omo se advertía en las primeras entradas dedicadas a esta ruta por los fascinantes Montes Torozos, el peregrino sabe que uno de sus mayores atractivos, radica en la presencia, durante la Edad Media, de las no menos fascinantes órdenes militares. Y de hecho, tiene la certeza del dominio de las dos órdenes principales, rivales, de hecho, pero cuyo acercamiento a su poderío y mediática idiosincrasia, constituyen, en el fondo, una no menos prodigiosa aventura histórica: la Orden del Temple y la Orden del Hospital de San Juan de Jerusalén. Fundada ésta última por comerciantes de Amalfi algunos años antes que la primera, el peregrino es plenamente consciente de que el lugar al que se dirige, lleva el nombre de la encomienda que los caballeros del Hospital tenían en un lugar situado a apenas unos insignificantes kilómetros de Valladolid y otros tantos de Simancas, ciudad que destaca no sólo por ser la sede de un impresionante Archivo Histórico, sino también, por ser el lugar donde en

El Monasterio de la Santa Espina

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C omo ya apuntaba en entradas anteriores, apenas el peregrino puso los pies en el interior de la iglesia de Santa María de Wamba, recordó las palabras del venerable anciano que, descuidando por un momento sus obligaciones en la preparación de la santa misa en ciernes, le comentara, entre nostálgico y orgulloso, que apenas unos breves escalones separaban, como por arte de magia, varios siglos de Historia. Fue en el claustro, reformado en el siglo XVIII, pero donde todavía sobrevivía, milagrosamente, una de las salas capitulares románicas más hermosas de cuantas había contemplado en sus largos años de camino, incluida la del monasterio alcarreño de Monsalud, que conociera unas semanas después y que tan buenas sensaciones le dejara, independientemente del templarismo que, en su segundo viaje a la Alcarria, le otorgara Camilo José Cela, dejándose llevar por las tradiciones del lugar.   Q uizá más versado en los aspectos modernos del monasterio, sobre todo a partir de finales del si