Los Magos están a punto de culminar su goético trabajo. En sus alforjas el oro, el incienso y la mirra se transmutarán en ilusión y alegría. Después, tan silenciosamente como han llegado -por algo son Grandes Adeptos- volverán a su Torre Dorada, situada en algún lugar ignoto de ese misterioso Oriente de donde procede toda la Luz. El Juego de la Oca continúa; la forma de su tablero, espiral y cíclica, no permite que uno esté demasiado tiempo inactivo. Ni siquiera habiendo caído, voluntariamente o no, en el pozo o en la cárcel. Nuevas rutas, nuevos destinos, pondrán a prueba nuestros sentidos e irán limando nuestros espíritus, garantizándonos nuevas sensaciones, nuevas oportunidades, y por supuesto, nuevos aprendizajes.Tal vez éste sea el año de la Gran Revelación y la Profecía Maya, como en su momento el terrible Efecto 2000, pase por el mundo sin más pena ni gloria. Que sea lo que tenga que ser; que pase lo que tenga que pasar. Pero, mientras tanto, que la ilusión no nos aleje de nuestras metas y tampoco del Camino. Que nunca queden en el olvido las palabras del Poeta: Caminante no hay Camino, se hace Camino al andar...
Ahora sí, ahora ya puedo decir: de Oca a Oca, y tiro porque me toca.
Comentarios
Te han traido carbón los reyes o un cayado nuevo para proseguir el viaje? Espero que lo último.
Un abrazo
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Pero en fin, dada tu "maldad", te aguantas con lo que te tocara.
Ponle herraduras nuevas al "Rocinante", remienda la montura, y sigue tu camino, que al menos tendrás nuestro ánimo y mejores deseos.
¡Cabalga de nuevo, Quijote de los románicos espacios!
Salud y fraternidad.