Entradas

Mostrando entradas de noviembre 2, 2020

Viajando con la leyenda: la Ciudad de Salomón

Imagen
Hablar de Medinaceli, es poner un dedo en la llaga de la España Mágica y abrir lo suficiente esa puerta de chiquero por donde ha de salir a los ruedos de la Historia, ese imponente morlaco que es siempre la Tradición. La Tradición, cuando de Medinaceli se trata, es como Peter Pan, metafórica y comparativamente hablando: ese Puer Aeterno, que se mantiene firme en sus trece, negándose obstinadamente a crecer e integrarse en una sociedad adulta, que ha perdido definitivamente sus alas. En ella, en Medinaceli, estuvieron los romanos, cuando andaban a la gresca con una Celtiberia que no se conformaba con ser felpudo de las sandalias imperiales, levantando sus temidas falkatas o espadas cortas, en la defensa del sagrado suelo patrio de Gárgoris y Habidis. Cuando estos sucumbieron también, fueron los visigodos quienes, después de saquear en Roma lo que previamente Tito había saqueado en el Templo de Jerusalén, decidieron –o al menos, eso refiere la leyenda- depositar aquí, en algún lugar igno