miércoles, 15 de junio de 2011

Rompimiento de Gloria



No se trata de un título elegido al azar, sino que, por el contrario, forma parte de un recurso artístico utilizado por los pintores de todas las épocas, y se refiere al inigualable espectáculo que a veces ofrece el sol al ponerse tras una masa de nubes, mientras éstas adquieren una genuina coloración, que varía entre el rojo y el oro.

Momentos espectaculares, sin duda inolvidables, que han marcado, a través del tiempo, y lo seguirán haciendo, el alfa y el omega de las etapas del peregrino, y que no puedo dejar pasar la ocasión, al menos de mostrarlos en este blog, tal y como me los he ido encontrando en mi camino. Un grato placer, que sin duda reafirma la aseveración de aquél filósofo francés -Paul Elouard- que dijo una vez: hay otros mundos, pero están en éste.